miércoles, 10 de julio de 2013

Nuevas cosas.

Muchacho y muchachas, queridos fantasmas cibernéticos, y las tres personas que leen este estupendo espacio de terapia personal y autobiografía, tengo un cuento que anunciarles, que por una vez en la vida no es una historia causada por un estupor alcohólico, un descuido o simplemente el deseo de perdición que a veces cargamos en nosotros mismos.

Ahora se trata de un pequeño nuevo hobby que tengo, desde hace unos meses estoy entrenando artes marciales mixtas. pequeño paréntesis, me siento super pretencioso escribiendo esta parte. no soy una maquina de matar, no pienso convertirme en van damme, ong bak, ni ninguno de esos. pero si, estoy entrenando, (it´s freaking osom!!) ahora, cuando entrenas algún deporte, una de las consecuencias naturales es participar en una competencia, sin afanes profesionales ni nada,  todas esas carreras en el centro de león, no me van a decir que todos van a ganar o si? sin embargo cuando juegas soccer, así sea en las retas de la cuadra. Muchas veces parece que el honor y tu vida están en juego, y te comportas de una manera adecuada a ese pensamiento. es decir, esforzándote y quizá hasta haciendo un poco de trampa, con tal de ganar.


Sin embargo, el hecho de subirme a una jaula, en un antro que era antes un table, a partirme el queso con otro muchacho, me causa algunos conflictos emocionales. (claaaro, no es como que escriba por gusto queridos y no existentes lectores, solo son ustedes mi terapia) por lo tanto estoy aquí ventilandolos. es una competencia verdad? un simple evento deportivo, digo yo no odio al wey al que voy a intentar partirle la cara, es mas no tengo deseos de lastimarlo, así que como narices, me subo con el a un ring convencido de que debo golpearlo hasta la inconsciencia.  (de estar interesado la pelea es viernes 19 , quizá haya un articulo con las consecuencias fotográficas.... quizá)

No me malentiendan aun quiero pelear, porque como prueba de que entreno quiero competir y compararme con otros, y , la verdad. me quiero sentir como un guerrero de la época moderna, con una prueba de virilidad y masculinidad completamente ridícula para algunos, incluso en algún  momento para mi.

El  punto en cuestión es, que no entiendo que me lleva a pelear, lo voy a hacer, sin duda, que seria de ustedes sin que su amable escrito sacrificara algunas neuronas y algo de sangre para traerles nuevas experiencias a su vida cibernautica. lo se, la bondad personificada soy yo, y de paso la modestia también.

Eso es todo por hoy, en nueve días mas noticias y quizá fotos de mi nariz rota, por favor no dejen de escribirnos.

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