Todos cambiamos,
no es necesario hacer una pregunta, el solo hecho de respirar hace que
constantemente experimentemos cambios, que, a pesar de no ser realmente
diminutos. Jamás nos damos cuenta de que ocurren.
Bajo esa lógica,
cuando si nos damos cuenta de un cambio, es algo enorme, aun cuando son cosas
que no duran en el tiempo. Un resfriado puede tenernos prácticamente derrotados
por un día o unas horas, y luego simplemente desaparece.
Cuando hay una
evidencia física los cambios pueden ser asimilados o combatidos, incluso
potenciados. Si te dicen “estas gordo” lo asimilas (llorando en el baño y
comprando un galón de helado), pretendes combatirlo (dos idas al gimnasio y
luego rutina de asimilamiento) o lo combates de verdad. (Abandonas una de tus
tres comidas diarias).
Bien ya olvide
realmente por que estaba escribiendo todo esto de los cambios, probablemente
estuve algo nostálgico por un momento (un par de días). Y ya saben pense en
solucionarlo escribiendo algo que todos realmente sabemos, pero que nos encanta
decir de una manera como si hubiéramos descubierto el hilo negro. Generalmente ese
comentario de “todo tienes sus pros y contras” detesto esa frase, detesto aun
mas que sea verdad, y me detesto a mi mismo cuando no puedo pensar una manera
de no usarla mientras hablo.
¿Cual será esta
necesidad de hacer tan obvia la sabiduría que simplemente la pasamos por alto?
Se supone que la
capacidad de almacenar nuestro conocimiento es lo que ha hecho de la raza
humana lo que somos hoy: una especie entera que parece dirigida a la autodestrucción
mientras silba una canción.
Quizá toda la cosa apocalíptica sea demasiado, pero, en
serio ¿Cuál es nuestro problema?
No hay comentarios:
Publicar un comentario